A veces, lo único que necesitas para desconectar es comprimir tu mundo en unos pocos metros sobre ruedas. Subirse al Citroën Holidays fue como cerrar la puerta al ruido y abrirla a la libertad. No sabíamos con certeza adónde íbamos, pero sí cómo queríamos llegar: sin mapas, sin horarios, sin prisas y sin renunciar a nada: eso es lo que nos regaló esta escapada en camper.